miércoles, 12 de octubre de 2011

Nuevo rock nacional


La guerra se convertiría en uno de los capítulos mas oscuros de la historia argentina, pero tuvo un efecto revitalizante en el rock.
En mayo de 1982 el Festival de la Solidaridad Latinoamericana juntó  grandes bandas del rock argentino. El recital tuvo el objetivo de apoyar a las tropas que luchaban en las islas, aunque era también una forma encubierta de protesta contra la guerra y un llamado a la paz. El rock en inglés era censurado en la radios y como debían llenar con algo el espacio que dejaba el rock en inglés, lo hacían con rock nacional.

Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota fue ganando escala nacional a partir de su política de independencia frente a las empresas discográficas y sus particulares letras.


En 1979, en La Plata se formó una banda new wave llamada Virus.
En Buenos Aires, tres jóvenes influenciados por el post-punk inglés comenzaron a intercambiar ideas, armando una banda con el nombre de Soda Stereo, que se convertiría en la banda más popular del rock iberoamericano.


En 1980 comienza a tocar la banda pionera del punk rock, Los Violadores. Miguel Abuelo para esa época formaría  Los Abuelos de la Nada, que contaría con la presencia de Andrés Calamaro. Incorporaron sonidos mas modernos y bailables que llamaban la atencion de los jovenes. Así, se convirtieron en la banda mas exitosa del momento. En 1981, Miguel Mateos, luego de hablar con Freddie Mercury, ganó la oportunidad de telonear a Queen en su show en Buenos Aires, con su banda Zas. En Mendoza una banda de pop-rock llamada Los Enanitos Verdes comenzaría como un trío hacia 1979. En 1981 un italiano educado en Inglaterra llamado Luca Prodan llega a Argentina y se instala en Traslasierra en Córdoba para terminar formando la gran banda Sumo.

Pappo fundó Riff y surgió V8. 
Almendra y Manal se volvieron a juntar. Charly García y Luis Alberto Spinetta continuaron con sus carreras como solistas.
En 1983, Argentina entró en una nueva etapa de su historia, con la inauguración del gobierno democrático de Raúl Alfonsín. Entrar en democracia significó la desaparición de la represión y de la censura del gobierno militar, por lo que la libertad de expresión volvió a florecer. Las canciones que criticaban al gobierno militar se multiplicaron, algunas con letras alegóricas, como «Tiempos Difíciles» de Fito Páez (cantada por Baglietto), «Maribel se durmió» de Spinetta (dedicada a las Madres de Plaza de Mayo ), «Puede verme» y «Ángel del pasado» de Ignacio Copani, etc.

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